#13 - acerca del trauma, y del dormir, y del rebaño.
“There’s a real relief when you stop wishing that something was different”.
Kelsey Chittick, donde Attia.
#0 algún enlace
No demasiado en esta carta. Uno largo de 2016:
¿Está usted moralmente modificado? El posible dopaje no intencionado de nuestra ética sobre (posibles) efectos de la medicación sobre la moral.
Me interesa cada vez más el tema de cómo compuestos moleculares nos afectan no sólo física sino también mentalmente. No llego (ni de lejos) al punto de evitar una medicación pero soy cada vez más consciente del coste que tiene.
#1 de vender riñones o niños
Sacado de contexto el otro día leí esto: “Si prohibimos [hemos prohibido] la compraventa de órganos también podemos prohibir la gestación subrogada”.
Y me parece erróneo pero discutible.
Dejemos a un lado por un momento los aspectos legales porque se puede prohibir todo y hay cosas que no se prohíben pese a ser peor que casi cualquier otra (el alcohol sin ir más lejos).
Pero vayamos a lo moral.
En contra de prohibirla
Dos problemas con esa afirmación:
Uno es presuponer que no existe el altruismo o que éste no es la causa principal de hacer algo así. Y la hay. Hay gente genuinamente buena (igual que la hay genuinamente mala).
El otro es presuponer que toda gestación subrogada tiene un matiz económico, algo que no se aplica a los órganos: Se permite la donación en vida con condiciones (altruista, con revisión de comité ético, etc)
Por otra parte es indiscutible que una gestación tiene unas consecuencias (fijas y también posibles) para el cuerpo de la gestante pero también lo tiene una donación u otras actividades que permitimos, o no prohibimos, como sociedad (prostitución, consumo de drogas, consumo de alcohol, etc)
¿Por qué una sí y otra no? Por el punto siguiente
A favor de prohibirla
El principal problema que tiene la gestación subrogada es, precisamente, las consecuencias y la imposibilidad de saber si quien lo hace es por necesidad o por altruismo.
Si hay una posibilidad de que alguien haga algo así por necesidad sólo para que otros (con mayor capacidad económica) puedan satisfacer algo que no es un derecho natural el Estado debe estar ahí para protegerlo incluso de sí mismo.
¿Entonces?
No sé, no lo tengo claro.
Mi postura es que uno debe ser dueño de su cuerpo para hacer lo que quiera con él, desde alquilarlo (y eso incluye todos los casos descritos) hasta romperlo (comiendo, bebiendo, fumando, drogándose, suicidándose).
Pero no soy naíf: entiendo que “ser dueño de tu cuerpo” es muy relativo. Si hay incentivos económicos y una relación desigual de poder está claro que la decisión “consciente” es más discutible.
Se podría argumentar que “entonces no permitamos el pago por ello” pero siempre será posible un pago por ello. Si prohibir algo (p.ej: drogas) acabase con su existencia sería todo maravilloso.
Por otra parte ése mismo argumente sirve para no prohibirlo sino regularlo: aunque lo prohíbas existirá igual ergo mejor permitirlo con condiciones.
Lo dicho: no sé. Creo que no hay postura buena en ciertos temas.
#2 de Kelsey Chittick
Solía ver/escuchar el podcast de Peter Attia, médico enfocado en longevidad, porque hay muchos aspectos de los que trata que me resultan atractivos, y más de la manera que los trata porque busca las razones, experimenta, quiere obtener respuestas y la verdad (fisiológica) por encima de todo. He reducido un poco el consumo porque juntar eso con alguien obsesivo y con tendencia a la hipocondría a veces no es buena combinación.
La última semana, sin embargo, publicó algo que se sale un poco de la temática más fisiológica y se adentra en la salud mental, y más en concreto en el duelo tras la pérdida de un marido.
La entrevista es a Kelsey Chittick que perdió a su marido Nate, jugador profesional de la NFL y ganador de la Super Bowl, de 42 años, quedando sola con dos hijos pequeños.
Durante el episodio tratan muchas vertientes del asunto: desde la pérdida en sí, cómo procesarla y cómo encontrar de nuevo felicidad.
La primera parte (los primeros 50 minutos) son una explicación del contexto hasta que Nate fallece por un ataque al corazón. En la segunda parte la conversación gira al post-evento y los cuatro años posteriores.
Es una entrevista muy completa, donde ella lleva el peso de la misma con ocasionales (mínimas) intervenciones de Attia.
Es una entrevista de donde puedes sacar muchas conclusiones, mucho aprendizaje y que no aplica sólo a perder un familiar sino a cualquier proceso traumático por el que haya que pasar un duelo.
Si 2h se hacen muy largas yo empezaría directamente por el minuto 50:
208 - Tragedy, grief, healing, and finding happiness | Kelsey Chittick
A continuación 4 partes específicas de la entrevista que me han gustado especialmente.
Sobre el proceso del duelo
El segmento del proceso del duelo (1:25 a 1:30) describe muy detalladamente el proceso desde que todos los momentos te recuerdan lo que ha ocurrido hasta que, a fuerza de vivir otros momentos donde esa persona ya no está presente, tu cerebro empieza a crear caminos neuronales diferentes a los anteriores y a crear nuevos recuerdos independientemente de esa persona.
Los recuerdos siguen estando pero cada vez es menos frecuente que todo te lo recuerde.
Sobre cómo procesan los niños el dolor
Aquí se describe cómo procesan los niños el dolor, cómo hay ciertas cosas que perciben de manera mucho más intensa (en el colegio son “el niño sin padre”, nadie hace ya bromas con él, los otros padres bajan la vista cuando lo ven).
Otra parte relacionada es cómo pasar el duelo con hijos y cómo ellos ven ese proceso. Hay una explicación muy buena sobre las diferencias en la percepción del futuro de padres e hijos porque estos últimos no son conscientes del todo de qué se pierden: no sabes lo que duele que tu padre no esté en tu boda porque, al contrario que el adulto, no tienes la experiencia de pasar por una boda.
Sobre los psicodélicos para curar traumas
Ésta fue una parte muy, muy interesante de la entrevista dividida en dos segmentos.
En el primer segmento (hasta el min 1:47:40) Kelsey habla de cómo fue su primera experiencia con el uso de psicodélicos. De cómo pasó de su postura inicial, completamente opuesta a su uso, a probar para intentar paliar el trauma de la pérdida de su marido y de cómo el proceso le permitió volver a “visitar” y “hablar” con él, procesar la ira subyacente contra él por “haberla dejado”, y la paz que encontró tras ello.
El segundo segmento comienza con una breve introducción acerca de las diferencias entre drogas que cambian tus rasgos (“traits”) y drogas que no. La cocaína es una que no lo hace: cambia tu actitud mientras estás bajo los efectos pero no cambia tus rasgos personales, no te hace ver el mundo de manera diferente cuando no la estás usando. Lo mismo con el alcohol.
En cambio, otras como los psicodélicos (especialmente psilobicina y MDMA) pueden tener efecto sobre tus rasgos psicológicos.
Posteriormente comentan cómo el apoyo de la terapia psicológica es necesario y que el uso de estas sustancias por sí sólo no haría nada sin un trabajo previo más tradicional.
Sobre el concepto de aceptación radical
El último segmento que me interesó especialmente es en el que hablan del concepto de “aceptación radical” y cómo llegar a ello.
Reconozco que es un concepto al que le tenía un cierto desdén por cómo se suele encapsular en la auto-ayuda y se vende en libros para encontrar tu paz interior. Lo cual da grima, así en general.
Pero por otra parte es básicamente por cómo guío mi vida así que si nos quedamos sólo con la explicación de ellos dos y omitimos todo el marketing que se suele asociar a ello… lo entenderemos mejor.
#3 de la gente irrelevante
Uno de los motivos con más peso por los que dejé las redes sociales es por la imposibilidad de discutir tranquilamente sin que cualquiera pudiera venir y decirte una estupidez.
De vez en cuando entro para leer a las tres o cuatro personas de las que saco ideas y me reafirmo en que no merece la pena perder tiempo ahí.
Un ejemplo fue este tweet institucional:
Organismo público diciendo algo lógico.
De la web del Plan Nacional sobre Drogas se extrae esto (para poner contexto):
El Plan Nacional sobre drogas tiene como:
Misión: Diseño, establecimiento, ejecución y evaluación de las políticas que, en materia de adicciones, se desarrollan desde las Administraciones Públicas y entidades sociales en España.
Visión: Favorecer una reducción significativa del impacto sanitario y social de las adicciones en su conjunto, con especial énfasis en la prevención, y en el apoyo a la incorporación social de las personas afectadas por las mismas.
El tweet, con la misión y la visión en mente, es impecable. Si acaso se queda corto (ver punto siguiente sobre el dormir) pero poco más. Es una obviedad, es ciencia. Habla de posibles soluciones conductuales para evitar la plaga de soluciones farmacológicas que lleva tiempo incrementándose y siendo preocupante.
¿Hay más factores? Sí. ¿Hay casos de insomnio asociados a enfermedades o desajustes más graves? Sí. ¿Está explicado en el artículo que enlazan? También.
El caso es que hablamos de una institución pública que tiene que comunicar consejos generales en una red social, e implementar políticas en el mundo real.
Lo dicho, un tweet conciso y válido.
¿El resultado? Cientos de personas intentando corregir sin mucha idea lo que es indiscutible, obviando el contexto de lo escrito en el tweet anterior, queriendo hacer la gracia o queriendo demostrar lo listos que son.
La gente, a bulto, no es otra cosa que rebaño.
Hay que huir del rebaño. Evitar siquiera replicar porque no hay nada que les vaya a hacer cambiar de opinión. El que quiere que cambien su opinión no va soltando rebuznos en público.
Y tangencialmente: cuando tu identidad va ligada a tu ideología estás perdido. Súmale el ego y el querer demostrar que “perteneces al bando correcto” (sea lo que sea eso) y el resultado es desastroso.
Aquel que quiera entender el mundo, intentar profundizar en lo que pasa, intentar producir algún pensamiento con un mínimo valor, lo primero que tiene que hacer es evitar a la gente y, puntualmente, buscar a las personas.
No hay otro camino,
#4 del dormir
Pequeño aviso: Todo lo que comento aquí es experimentación propia, con base científica pero poco más. Es lo que hago y son los resultados que obtengo.
A la izquierda mi dormir entre Enero/Julio de 2020. A la derecha mi dormir entre Enero/Junio de 2022.
Comparar es bueno
Por experiencia propia y por lo que le escucho a compañeros, leo a conocidos, etc, un porcentaje notable de gente no duerme bien y, lo que es más terrorífico, creen que no hay demasiado que puedan hacer para solucionarlo.
Las razones que se suelen dar (y que también tenía yo hasta hace nada) son “no me entra sueño antes”, “recién cenado no me voy a ir a la cama”, o “soy más nocturno que diurno”.
Y si bien es cierto que esto último es completamente real (Cronotipo - Wikipedia) el asunto es más complejo que culpar a la genética porque influye, pero no determina.
Dimensiones del sueño
Hay dos factores fundamentales: cuánto se duerme y cómo se duerme.
Sobre el cuánto lo más aceptado es que un adulto “debería” dormir entre 7'5 y 9 horas al día. No necesariamente seguidas, por cierto.
Sobre el cómo, sin meternos en profundidad: Entre 15% y 25% de sueño profundo es lo ¿ideal? ¿mínimo?
Cambios para mejorarlo, por orden de importancia
Luz
Aunque hay quien habla del móvil sólo por ser lo más habitual a la hora de desvelarse el cambio más importante ha sido eliminar o suavizar todas las fuentes de luz a partir de cierta hora.
A partir de las 18:00 no uso el ordenador, rara vez uso el móvil/tablet (y cuando lo hago es con la iluminación muy baja). No usamos tampoco luz artificial directa (la del techo, vamos), y lo único la TV con no demasiado brillo.
Hora
Más importante que irse pronto a la cama es la consistencia a la hora de irse. Es saber cuál es “tu hora” (la mía empieza a las 9PM) e ir a dormir cuando empiezas a notar el adormecimiento.
Comida
Éste es uno de los puntos que afecta a la calidad del sueño más que a la cantidad.
Cena de monje y sobre 3 horas antes de ir a la cama. La razón que más lógica me parece, de nuevo sin entrar en profundidad, es menos producción de jugos gástricos, menos posibilidad de reflujo, menos hacer trabajar al sistema digestivo cuando el resto de sistemas están más en reposo.
Café, Alcohol, bebibas energéticas
Sobre el alcohol y las bebidas energéticas no puedo opinar nada más que desde un punto teórico: evitar (y no sólo al dormir). El alcohol adormece, sí, pero te destroza la calidad del sueño.
Café: He ido reduciendo y al final sólo tomo el de la mañana, pero para el asunto del dormir: nada 8h antes de ir a la cama. Empecé a notar la diferencia en somnolencia cuando no tomaba ninguno después de las 13:00
Otros a tener en cuenta
Algunas rutinas, opiniones, pruebas, que he ido leyendo, probando, y su resultado:
En la cama sólo duermo. La (rarísima) vez que pase más de 10 minutos intentando dormir, me levanto. No leo, no como, no veo el móvil, no tengo ni luz en la mesilla.
Beber agua antes de ir a dormir hace que las posibilidades de despertarse aumenten, pero no tengo claro hasta qué punto.
La habitación fresca (que no fría) mejor que caliente.
Siestas: en principio a favor. Las que he probado, poco después de comer (sobre las 13:00 o 14:00), de máximo 25/30 minutos, no me han sentado mal: no me aumenta la somnolencia durante el día ni me quitan sueño por la noche.
Roncar
El problema de roncar no es tanto el ruido o la gracieta sino la posible falta de oxígeno al cerebro y las consecuencias a largo plazo de eso.
Si tu pareja te dice que roncas habitualmente yo iría pensando en hacer una polisomnografía.
Apunte final
Creo que una de las principales funciones de un reloj inteligente es poder medir (con una cierta precisión) esos parámetros, desde los más básicos como profundidad del sueño, tiempo total, pulsaciones, etc, hasta otras menos obvias (pero igual de interesantes): respiración, ruido, oxigenación.
Cosas siendo medidas
Y como último, último detalle: Hay mil otras cosas que pueden destrozar el sueño, desde falta de ciertas vitaminas, desajustes hormonales, etc. Lo ideal es saber primero que todo a nivel de analítica está bien y luego trabajar el resto.
Y entender que lograr un estado aceptable de sueño puede tardar meses.
#5 pensamientos en la ducha
Sartén de acero inoxidable: A favor. Cuesta entender cómo pillarle el truco para que no se pegue la comida pero después mejor que las antiadherentes. Excepto para huevos fritos, claro (aunque he visto vídeos de gente haciéndolo; magia).
Me voy dando cuenta con el tiempo de que uno no puede ser ordenado en el plano mental si no lo es en el plano físico. ¿Por qué? No lo sé, pero intuitivamente sé que es así. Si quieres poder concentrarte y pensar tienes que haber alcanzado primero el orden físico a tu alrededor.
Veo muchísimos coches de Ucrania en Suiza, todos muy caros y potentes y me pregunto por qué. La intuición me dice que cuantos más posibles tienes más fácil es escapar de un sitio y establecerte en otro, pero no sé si hay algo que se me escapa.
BBC Panorama: Creo que lo más similar que hay en España es Informe Semanal, pero no deja de asombrarme cómo la BBC es (me parece) una cadena más independiente que TVE. Estos reportajes de Panorama (25 a 30 min. de duración) son bastante imparciales y no ocultan qué hace bien o mal un gobierno determinado. El último que hemos visto es “Surviving the cost of living crisis”. Subtítulos integrados al descargarlo.
Solía ver los monumentos clásicos como “bueno, ok, piedra sobre piedra, qué valor tiene”. Solía ser imbécil, vamos. El otro día tomando un café en Milán mirando para la catedral (600 años en completarla) pensaba que la función del arte, de lo grandioso, es inspirar. Es mostrar de lo que somos capaces. Es ponerle el listón a la generación siguiente. Sólo por eso ya tiene una razón de ser.
#6 l'ultimo
Poco más.
Que un abrazo.